La Comunidad de Madrid se ha sumado a Comunidad Valenciana y Murcia, las tres gobernadas por el PP, en su oposición al proyecto del Gobierno para que todos los alumnos de 5º de Primaria dispongan de un ordenador portátil, según informa la cadena SER. Las razones: que el modelo elegido, un Toshiba NB 200, puede causar problemas de salud a los niños.

Se trata del plan Escuela 2.0, presentado el pasado 12 de mayo por José Luis Rodríguez Zapatero, que entrará en vigor en septiembre y que consiste en una pizarra digital por aula, un ordenador por alumno, conectividad y formación del profesorado. Su presupuesto es de 200 millones en 2009-2010 repartidos para toda España. La primera comunidad fue la gobernada por Francisco Camps, cuyo responsable de Educación, Alejandro Font de Mora, acusó al Gobierno de «provocar la miopización de muchos niños» por repartir ordenadores de 10 pulgadas.

Seguir leyendo